Ermita de Sarsa, en Jaca. Un error

En Jaca se conservan las ruinas de la ermita de la localidad de Sarsa, románico del siglo XII que se conservaban en muy mala situación en las faldas de Peña Oroel. Sarsa quedó abandonado en el año 1970 y dos años después se trasladaron los restos de la ermita, con unas modificaciones de la nave, el tamaño y la disposición…, que en realidad más suena a chapuza que a obra de profesionales que desean la conservación de un monumentos románico de gran valor histórico.

El urbanismo debe intentar conservar sus elementos históricos, pero con rigurosidad. Tras dos años de abandono, con toda la techumbre derrumbada, parte de la ermita expoliada ya, se decidió el traslado, pero el Crismón se colocó en el Ayuntamiento empotrado en una pared, y el resto de las ruinas en unos jardines. No conformes con eso, el tamaño de la reconstrucción de acortó para adaptarlo a los jardines donde iba colocado todo, algo que suena a inmensamente tremendo. El ábside se orientó hacia el oeste en vez de hacia el este, para que quedara más estético en la zona. Se suprimió la portada norte y la sur se recolocó a los pies de la nave.

Queda el altar donde la autoridad religiosa realizaba las ceremonias dando la espalda a los feligreses y la ventana que daba luz al conjunto. Incluso en la colocación de las piedras, se observan a simple vista errores de encaje que dan cuando menos, pena. Hoy esto se hubiera realizado con muchísimo ma´s rigos histórico yd e conservación.