Para temporadas grises como este invierno lleno de nieblas en algunas ciudades, nada como recordar que existió el verano, que las flores volverán a llenarnos nuestros ojos de color, que el sol sigue estando, aunque ahora esté más lejos.
Es muy curiosa esta composición natural. Sorprendente de formas y colores. A ninguna persona se le ocurriría crearla artificialmente pues lleva excesivos componentes diferentes que todos tendrán su sentido de especie. Es flor dentro de la flor, como escondida y saliendo envuelta en pétalos de diferentes colores y formas es algo sumamente extraño. Como un falo que se ofrece desde dentro hacia fuera.